A partir de hoy y hasta el 28 de octubre se llevará a cabo la “Consulta Nacional Nuevo Aeropuerto” que el gobierno de transición ha impulsado para que la ciudadanía decida si está de acuerdo con que el Nuevo Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (NAICM) sobre terrenos del Lago de Texcoco o reacondicionar el actual aeropuerto de la Ciudad de México y el de Toluca y construir dos pistas en la base aérea de Santa Lucía.
Esta consulta se enmarca en lo que el gobierno electo llama 4ª. Transformación, por medio de la cual, pretende que los ciudadanos participemos directamente en las decisiones relevantes de la vida pública o democracia directa.
En principio, este cambio parece ser positivo, en la más que imperfecta democracia mexicana, sin embargo, no lo es tanto, cuando los instrumentos de decisión tienen claras deficiencias en el mensaje que se quiere transmitir.
La famosa consulta nacional, tendría que preguntarnos si queremos conservar lo que alguna vez fue el Lago de Texcoco, con todas las ventajas que esto tiene[1], o si queremos seguir destruyéndolo. ¡Ese debería ser el verdadero debate!
En este momento en donde vemos en las noticias islas de basura en el mar, que el sargazo se come las playas mexicanas del Caribe por verter desechos orgánicos en el mar, huracanes más peligrosos y devastadores, deshielo en los casquetes polares, aumento del nivel del mar, veranos más calurosos e inviernos más crudos, todo esto ocasionado por el cambio climático, los mexicanos tenemos la oportunidad de elegir que el Lago de Texcoco se conserve para bien de la Ciudad de México y de los municipios aledaños.
Recientemente en Alemania, un tribunal frenó la tala de lo poco que quedaba del bosque de Hambach y de esta manera, detener la ampliación de una mina de carbón. En México, las minas clandestinas que se explotan para obtener los materiales para el NAICM han afectado hasta el entorno de la ciudad más importante de la época prehispánica, Teotihuacán.
Tal vez la consulta impulsada por el gobierno electo esté sesgada, no tenga un mínimo de rigor estadístico o sea ilegal, pero lo importante es que podemos decidir si el Lago de Texcoco se conserva o no.
Porque, ¿para qué queremos un nuevo aeropuerto si no vamos a tener un planeta en dónde vivir?
Mauricio Elías es creador de LandingMX, nació en la Ciudad de México, estudió en la UNAM desde el bachillerato en donde estudió Economía, su paso por la Universidad de Essex en Inglaterra y sus múltiples estancias en otros países han definido su personalidad.
Dentro de sus principales intereses están los temas económicos, así como las actividades culturales y el ciclismo, que practica regularmente.
