El 28 de febrero se cumplieron los primeros 90 días del gobierno de Andrés Manuel López Obrador, en estos 3 meses de la llamada Cuarta Transformación (4T), el nuevo gobierno ha tomado diferentes decisiones económicas, muchas de las cuales no han sido las más acertadas, y también ha demostrado una fuerte improvisación en cuanto a la toma de decisiones al postular personas sin los conocimientos suficientes para ocupar posiciones importantes, como fue el caso de las personas postuladas para ocupar las plazas en la Comisión Reguladora de Energía (CRE), por poner un ejemplo.
A estos actos de gobierno, se ha sumado la decisión de inyectar recursos económicos a Pemex para evitar que la empresa estatal de energéticos quiebre en el futuro próximo. Esta decisión, como lo habían advertido los analistas económicos, traería consecuencias para las finanzas públicas del país y fue así, que el 1 de marzo pasado, la calificadora Standard & Poor’s (S&P) emitió un comunicado en donde cambia la perspectiva de la calificación crediticia de México de estable a negativa.
Como revisamos en entradas anteriores, las calificaciones crediticias de las 3 principales agencias de calificación van de la AAA a D[1], En este momento, México tiene asignada una calificación crediticia BBB+ por S&P, que es un grado medio, y hasta el 28 de febrero tenía una perspectiva estable.
El cambio a una perspectiva negativa viene dado por el deterioro de las condiciones económicas del último semestre de 2018 que se han venido revelando conforme avanza el tiempo y se van cerrando los datos económicos del año pasado, aunado a las decisiones económicas que ha tomado el nuevo gobierno, las cuales no han generado certidumbre a los diferentes actores económicos mexicanos y extranjeros.
Una de estas perspectivas es que, de acuerdo con Banco de México, la economía mexicana no va a crecer 2 por ciento en 2019, sino 1.6 por ciento, debido a que “en el ámbito externo, se ha observado una pérdida de dinamismo en el comercio mundial y en la actividad económica global más marcada de lo anticipado, lo que se prevé influya sobre la evolución de la demanda externa de México. En el ámbito interno, en el segundo semestre de 2018 y, sobre todo, a finales de ese año, se observó una desaceleración más pronunciada a la estimada en el Informe anterior. Esto condujo a un menor nivel del PIB al cierre de 2018.”[2]
A esto se suma la menor recepción de Inversión Extranjera Directa (IED) en el último año que pasó de 32.1 miles millones de USD en 2017 a 31.6 miles millones de USD en 2018, un 1.6 por ciento menos. Asimismo, la inversión directa nacional (pública y privada) mantiene una participación con respecto al PIB, al tercer trimestre de 2018, de 22.5 por ciento, sin embargo, su tasa de crecimiento se ha mantenido estancada restándole dinamismo a la economía mexicana.
El escenario no parece alentador en términos económicos, sin embargo, este gobierno apenas está comenzando, esperamos que las cosas mejoren en términos económicos para bien de los mexicanos.
Referencias
[1]Para la agencia Moody’s las calificaciones van de la AAA a la C.
[2]Banco de México (2019): Resumen Ejecutivo del Informe Trimestral, Octubre – Diciembre 2018, en: http://www.banxico.org.mx/publicaciones-y-prensa/informes-trimestrales/%7B738D9DBE-6868-AA4E-809B-746C168826E3%7D.pdf, consultado el 3 de marzo de 2019.
Mauricio Elías es creador de LandingMX, nació en la Ciudad de México, estudió en la UNAM desde el bachillerato en donde estudió Economía, su paso por la Universidad de Essex en Inglaterra y sus múltiples estancias en otros países han definido su personalidad.
Dentro de sus principales intereses están los temas económicos, así como las actividades culturales y el ciclismo, que practica regularmente.